Ruptura amorosa: Identificando el dolor para encontrar la sanación.
En esta publicación, exploramos el impacto emocional y físico de una ruptura amorosa, hablaremos sobre cómo la vulnerabilidad, la irritabilidad y la pérdida de interés afecta nuestra vida y te mostrare distintas acciones que puedes llevar a la acción para transformar esa situación. Si has experimentado una ruptura, esta guía te proporcionará el apoyo necesario para entender y sanar.
Claudia Restrepo


Hoy quiero hablarles desde el corazón a todas aquellas personas que están pasando por esta situación
Para comenzar hablando de los beneficios, primero debemos identificar qué es y cómo se siente una ruptura amorosa. Romper con alguien, sin importar el contexto en que se dé, es una de las situaciones más desestabilizantes que puede enfrentar una persona, porque no solo lleva el estado de tus sentimientos al límite, sino que tu cuerpo se resiente por la ausencia. Y ni hablar de los pensamientos que te sabotean, dando vueltas y buscando respuestas, buscando la falla, sea tuya o de la otra persona, y mostrándote todos los escenarios donde fuiste tonta(o), permisiva(o), errónea(o). Comienzas con un diálogo interno que nos muestra como víctimas y, en cuestión de segundos, pasamos a la culpa.
Comenzamos a percibir todo de forma más negativa y tomamos cualquier acción de manera muy personal. Estamos sensibles, irritables y perdemos, en alguna medida, el interés por ciertas cosas y/o actividades. Nos sentimos muy vulnerables y caemos, la mayoría del tiempo, en estados depresivos o adoptamos una de las herramientas más peligrosas que constantemente usamos los seres humanos: evadir
La importancia de validar nuestras emociones y como nos sentimos
Confrontar nuestras emociones y estar en permisión con lo que está sucediendo es el primer paso para cambiar energéticamente esta situación y salir del loop del victimismo y la culpa. La idea de estos encuentros con nosotros mismos es identificar desde qué espacio nos estamos relacionando con el otro: si este es desde un profundo sentimiento de carencia que creemos que debe ser llenado por otros, o desde el amor incondicional, reconociendo al otro como un espejo que nos refleja todo lo bueno y lo no tan expansivo. Siendo totalmente honestos con las expectativas que pusimos en esa otra persona y/o en la relación, de esta manera veremos nuestra responsabilidad en todo lo sucedido. No es que la otra persona me diera, o me atendiera, o me hiciera; en realidad, son las expectativas que pusimos en ellos y que está bien mirar y admitir que esa persona no pudiera o quisiera dar todo aquello que esperábamos. Cada uno está en un proceso de aprendizaje distinto en este plano.
Honestidad e introspección la clave para superar, sanar nuestro corazón
Entonces, si te encuentras en alguna área de tu vida en carencia, simplemente atraerás más de eso. Llegarán a ti no solo personas, sino también situaciones que se encuentran vibrando en esa frecuencia. Lo maravilloso de este proceso es ver al maestro (el otro) como un espejo, alguien que refleja y activa botones solo para llevar tu mirada hacia adentro y comenzar a reconocer que el cambio comienza contigo, te mostrare con algunos ejemplos:
Es importante observar en qué áreas o circunstancias de mi vida no me atiendo, donde me pongo en segundo lugar si percibo que el otro (mi pareja o expareja) no me presta atención, debo resolver aquellas emociones no trascendidas de rabia que mi pareja o expareja me hacía experimentar constantemente, así como la frustración que siento por cosas que ocurren o no en la relación. También debo reflexionar sobre en qué áreas de mi vida siento frustración y/o un estado de estancamiento.
Aquí es donde la magia comienza: cuando nos sumergimos en nuestras profundidades. En la oscuridad, encontraremos las respuestas.
Acciones para recuperar tu poder y tu energía
Se llama AMOR PROPIO: es honrar ese camino transitado con compasión y amor hacia ti, explorar nuevamente tu ser y enfocarte en él. Siempre la pregunta del millón es… ¿Cómo lo hago? Las respuestas están aquí. Pregúntate: ¿Qué me gusta? ¿Qué es eso que quisiste hacer y siempre lo aplacé? ¿Cuáles son tus hobbies? Tómate el tiempo de responderlas; ellas te llevarán a un estado de total presencia contigo y tu parte más elevada
Comienza a dedicar tiempo a todo eso que te expande, pero no el tiempo que te sobre o cuando te alcance… ¡NO! Es agendarlo en tu día o en tu semana de acuerdo con el tipo de actividades que te guste. Por ejemplo: “Me gusta caminar y estar en la naturaleza, pero mis días son muy caóticos por todas las actividades que debo hacer. Entonces, voy a intencionar un día de mi fin de semana para esta actividad.” O “Me encanta leer, pero no tengo tiempo; voy a intencionar un espacio de mi día para hacerlo, sea 5 minutos antes de ir a la cama o un pequeño espacio que tengo después de mi almuerzo.” Aunque veas estas actividades tan comunes y aparentemente sin sentido, aquí lo que estás haciendo es emitir una frecuencia al universo y en tu campo áurico, diciendo: “YO SOY MI PRIORIDAD.” Cuando atiendes y haces lo que te gusta, llevas automáticamente tu atención y energía a ese espacio, y eso se expande. Comienzas a atraer más situaciones y llegarán a ti personas que también te tratarán como prioridad.
Cuida tu diálogo interno. ¿Eres consciente de cómo te hablas? ¿Estás en total presencia contigo y tus pensamientos? Aquí es importante ser tu propio observador, y si este diálogo no es bueno y constructivo para ti, entonces pon manos a la obra para cambiarlo. ¿Y cómo lo haces? Háblate de forma positiva todos los días frente a un espejo y reconoce en voz alta aquellas cualidades que tienes. Por ejemplo: “Soy divertida(o)” y di por qué eres divertida(o); “Soy creativa(o)” y di por qué eres así. Al principio, te va a costar un poco y no serás capaz de ver todas tus cualidades, pero cuando lo haces diariamente, esto marcará un antes y un después en ti. Además, no puedes esperar que otros reconozcan tus cualidades cuando tú mismo no lo haces… todo comienza desde adentro. Este fue uno de los ejercicios más poderosos que cambió mi realidad y me llevó a recuperar mi poder.
Háblale bonito a tu cuerpo. Recuerda que el sostiene todas tus emociones, creaciones y con el experimentas todo aquí en este plano. Entonces, atiéndelo, cuídalo y respétalo; recuerda que es tu santuario.
Cuando te encuentres en esos días en que las emociones te superan y sientes más fuerte esa sensación de vacío y desolación, háblate: “Estoy bien. Esto que siento es normal, hace parte del proceso; lo voy a superar.” A veces, al decir esto, podemos sentirnos ligeramente mejor, pero si no es así, no importa; dale el permiso de sentirlo y pregúntale: “¿Emoción, qué información tienes para mí?” Y solo permanece atenta(o). La acción que estás haciendo es darle el comando a tu mente de que todo está bien, y no sentirá que esa emoción o sensación es una amenaza. Comenzará a liberar los químicos que tu cuerpo requiere para sentirse tranquilo.
Conclusión
Desde mi punto de vista, de esto se tratan las relaciones y sus rupturas. Quiero que te lleves algo muy presente: a veces nos cuesta más de lo que pensamos salir de estas situaciones. Es tanto el dolor que tenemos que no nos permite avanzar por nuestros propios medios para mejorar nuestra situación y superar esa etapa de nuestra vida. El consejo es el siguiente: BUSCA AYUDA. Ella vendrá o se revelará cuando estemos dispuestas a recibirla. No importa qué tipo de terapia sea, simplemente acciona hacia ella. Si no sabes cuál es la indicada para ti, conecta contigo y lanza la pregunta: “Universo, muéstrame con total facilidad cuáles son las terapias y herramientas que me ayudarán a comprender esta situación y trascenderla.” Créeme, ellas llegarán a ti. Puedes escuchar de ellas en un podcast, ver algún reel o post en una red social, un video, o simplemente leyendo un blog.
Las rupturas pueden ser momentos dolorosos y desafiantes, pero también son oportunidades para el crecimiento personal y la sanación. Si te sientes perdido o abrumado, recuerda que no estás solo en este camino. Mis terapias energéticas y coaching angelical están diseñados para ayudarte a liberar las emociones atrapadas, encontrar la claridad que necesitas y reconectar contigo mismo.
Te invito a dar el siguiente paso en tu sanación: agenda una sesión y juntos trabajaremos para transformar este dolor en una nueva oportunidad de amor y bienestar. Al final de cada ruptura, hay una oportunidad para renacer. ¡Permíteme acompañarte en este hermoso proceso!